jueves, 10 de mayo de 2012

Los primeros pollitos de 2012

Este año he puesto dos parejas a criar en primavera, son las formadas por Ártico y Elsa (la pareja que tengo desde hace más tiempo y que hasta ahora no había conseguido criar), y luego el ya experimentado padrazo Indy, y la primeriza Thaïs.
Esta entrada la dedico a la primera parejita, ya que hay bastantes días que resumir sobre ellos :)

- Nidada de Ártico y Elsa

En febrero les puse en una jaula de cría con su nido porque después de 2 años y varias falsas alarmas (que parecía que querían criar pero al final nada de nada), quería que esta primavera fuese ya la definitiva y dejarles el tiempo que necesitasen.

Arti y Elsa siempre han estado emparejados, basta ver imágenes como
ésta en la que comparten mimos. 

Se ve que Elsa pensó que ya era hora de dejar de hacerme esperar (y de sufrir envidia viendo a otras hembras criando) y puso 3 huevos, pero desafortunadamente no estaban fecundados, ya que pude verlos a través de una linterna (si a los 3-4 días empiezan a aparecer unas venitas rojas es que vienen con premio, pero si sólo se ve la yema amarilla están estériles). Como los huevos estaban hueros, y Elsa los incubaba religiosamente, no quise que se desgastara cuidando de algo que no tenía futuro, así que se los retiré.

Ártico con la cera de color marrón por un problema hormonal.
Creo que una posible causa de esta falta de fertilidad era que Ártico pasó una racha de bajón hormonal; a pesar de que siempre ha tenido la cera azul intensa, me fijé que se le había aclarado un poco ese azul y fué adquiriendo un tono marrón... mmm, mala señal.

Los problemas hormonales pueden estar debidos a varias causas: machos viejos (Ártico lo compré ya adulto, así que desconozco su edad), algún tumor en los órganos reproductores, o en el mejor de los casos, simples trastornos transitorios.

En esta foto se ven pocos restos de pielecita
marrón, eso indicaba que ya estaba recuperado.

Estuve suministrando vitaminas en el agua de Tabernil AD3E, que están aconsejadas para aumentar la fertilidad de los pájaros, y poco a poco fué recuperando el color de siempre mientras ese color marrón desapareció como si fuera un pellejito.

También Ártico recuperó la ilusión y se volvió más activo (durante esa mala racha estaba muy apático y tristón), y esa mejora en sus estado de ánimo vino acompañada de ganas de cortejar a Elsa.






Un mes después de retirarle los huevos Elsa volvió a poner, en esta ocasión 4. Con gran alegría comprobé que el primero estaba fecundado ¡no sólo habían hecho los deberes, sino que con esto me aseguraba que Ártico es fértil! El segundo también venía premiado, y el tercero parecía que también pero ví que tenía un anillo rojo señal de muerte del embrión en los primeros estadios del desarrollo. El cuarto también venía fecundado.
Cuando pasa una semana, un huevo fecundado se vuelve de
color blanco, en cambio si no tiene embrión permanece rosado,
como el huevo de arriba a la derecha.
¡Son tan pequeñitos cuando nacen!
Pero claro, tienen que caber dentro del huevo...
Tras una incubación perfecta por parte de Elsa, a los 18 días nació el primer polluelo, pero ocurrió algo que a veces pasa con primerizos: Elsa no le alimentaba.
Tuve que preparar papilla calentita y dejarla con una consistencia bastante diluída que se asemejara a la sustancia líquida que le proporciona la madre cuando son así de pequeñitos, que comúnmente se denomina "leche de periquita" (pero no es leche, sino un líquido que genera en el proventrículo).

Tuve que darle dos dosis de papilla (esperando a que digiriese la anterior) antes de que su madre aprendiese que es ella la que tiene que alimentar a sus crías, no sólo incubar los huevitos.

Se ven tan frágiles de recién nacidos, blandos y rositas como si
fueran gominolas, pero crecen a una velocidad vertiginosa.



Las hembras ponen los huevos día sí, día no, y por esa razón los pollos también nacen en días alternos, de esta manera se organizan para alimentar a todos sobre todo cuando hay nidadas numerosas (he llegado a ver 9 ó 10 pollos en un mismo nido, si nacieran todos a la vez sería un caos y como sólo la madre puede segregar la "leche de periquita" no podría dársela a todos sus polluelos).


El segundo pollito abajo a la derecha, y entre ellos el huevo
fecundado del cual nacerá el último polluelo, ya que el huevo
que se ve a la izquierda, más rosado, no está fecundado.

El segundo pollo se esperaba para el día 8, pero se retrasó un poco y nació ayer. En la foto se puede observar la diferencia de tamaño entre el primero y el segundo. Ya dentro de poco toca anillar al mayor, ya que para meter la anilla hay que flexionar un dedo y esto sólo puede hacerse cuando tiene más o menos una semana de edad y aún tiene las articulaciones blandas, si se retrasase habría riesgo de romperle algún dedito o que simplemente la anilla no cupiera por los 3 dedos.

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